Elena era una mujer organizada, de esas que planifican cada detalle. Siempre tenía una agenda repleta de notas, listas de tareas y recordatorios. Su lema era: “Si lo controlo, no me sorprende”.
Pero un día, la vida decidió mostrarle que no todo podía estar bajo control. La empresa donde trabajaba anunció recortes, y de pronto se encontró sin empleo, con cuentas pendientes y dos hijos pequeños que dependían de ella.
Elena, acostumbrada a sostenerlo todo con sus propias fuerzas, sintió que el suelo desaparecía bajo sus pies.
Una mañana salió a caminar para despejar su mente. La ciudad estaba cubierta de una densa niebla. Apenas podía ver unos pasos adelante, y a lo lejos, un puente colgante la esperaba.
Elena se detuvo. Su corazón latía fuerte. El puente era largo, y con la niebla no podía ver el final. El miedo le gritaba: “¿Y si no resiste? ¿Y si te caes? ¿Y si al final no hay nada?”.
En ese momento recordó algo que había leído: “Confiar en Dios es como sentarse en una silla; no dudas de que te sostendrá.”
Respiró profundo. “No necesito ver el final —pensó—, solo necesito dar el primer paso.”
Y así lo hizo.
Un paso… luego otro… y otro más. El puente crujía, la niebla seguía allí, pero Elena avanzaba. Con cada paso, su confianza crecía, y aunque no veía el final, sentía que estaba sostenida.
Cuando finalmente salió de la niebla, descubrió que había llegado al otro lado. El puente la había llevado justo a un sendero iluminado por el sol.
Tiempo después, también en su vida, encontró un nuevo trabajo mejor de lo que había imaginado, y su fe había crecido más que nunca. Elena comprendió que, aunque no siempre vería el camino completo, cada paso en confianza la acercaba a su propósito.
Lección para la vida
Confiar en Dios no significa que la niebla desaparezca o que el puente deje de crujir. Significa que, aun sin verlo todo claro, eliges dar el paso porque sabes que Él sostiene tu vida.
Al igual que Elena, tú también puedes tomar la decisión hoy:
👉 No dejar que el miedo paralice tus pasos.
👉 Elegir confiar en que Dios conoce tu final, aunque ahora no lo veas.
✨ Moraleja: La confianza no elimina las pruebas, pero sí cambia cómo las enfrentas. Cuando eliges confiar, descubres que siempre hay un camino seguro al otro lado.
Por: William de Jesús Vélez Ruíz [WilliVeR]
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